viernes, 1 de diciembre de 2006

y Tocopilla sigue existiendo...

Una reflexión muy amena acerca de la presencia de Alejandro Jodorowsky en la ciudad de Tocopilla, la ciudad que lo vio crecer y partir. Escrita y puesta en linea por un servidor...
Alejandro Jodorowsky nos visitó, que importante visita hemos tenido ¿no?... Este hombre quizás un poco loco pero con una mente fascinante vino a Tocopilla, suena increible pero es cierto, vino a Tocopilla... Se sentía la imponencia de este multifacético ser en el ambiente, era como si anduviera un actor de Hollywood por las calles de la ciudad, o al menos esa sensación me dió a mi que conozco su trayectoria artística en el mundo. Me pregunto que lo hace ser de esa manera tan especial, ¿el ser tocopillano y estar lejos de Tocopilla? ¿el vivir muchos años en el extranjero? ¿el respeto que se ha llevado en los medios? ¿Su sencillez y soltura al decir las cosas?, Quizás... Nunca nos olvidaremos de sus ocurrencias como la de forestar los cerros de Tocopilla (por allá por el año 2000) y que nunca se llevó a efecto, logicamente esto, si se plantearan las autoridades llevarlo a cabo, les sería un verdadero dolor de cabeza, imaginemos que a duras penas pondrán pasto (y artificial) al Estadio Municipal, y esto lo digo sin tomar en cuenta las numerosas áreas verdes que se están secando en la ciudad por la falta de riego ¿o es que los mismos vecinos tienen que regar los arboles y áreas verdes (pasto) y la municipalidad ahorrar asi un poco (un buen poco) de agua?. Estas palabras me nacen de no se donde, pero les aseguro que son de corazón, el gallo me cae bien, he seguido su itinerario acá en Tocopilla y bueno, me lo imaginaba más alto (jaja es una talla) y que se quedaría al menos dos dias, pero bue... su apretada agenda de seguro no se lo permitió.
No te mueras nunca AJ!

miércoles, 15 de noviembre de 2006

De como llegaron las Baratas a Tocopilla.

A todo esto, los indeseables bichos comúnmente llamados por la gente "baratas", en otras partes del globo se les conoce como "Cucarachas"...
Aunque puede parecer una historia un poco absurda, de verdad pasó en Tocopilla hace un montón de años atrás, aproximadamente por los años 40's. Cuenta la leyenda que en Tocopilla nadie conocía a esos asquerosos insectos que habitan en la basura y alcantarillas de toda ciudad, hasta que fueron traídos desde el Japón en un barco de carga. Claro, era normal que barcos de carga trajeran mercadería a los diversos establecimientos comerciales de Tocopilla, es por eso que el concesionario de "La Casa verde" el señor japonés Samuel Michinaga, había mandado a pedir una mercadería consistente en grasas de animales, lo malo de esto es que cuando la carga llegó a Tocopilla, esta venía infectada con "baratas" o "cucarachas". Eran tantos los animales que se trató de exterminarlos pero todos los esfuerzos fueron en vano, ya que cada vez habían más y más. Fué asi que las calles cercanas a "La casa Verde" (actualmente pertenece a SQM del puerto) se veían atestadas de "baratas" algo así como un "mar de baratas" y poco a poco se fueron yendo a otros sectores de la ciudad. Asi fué como estos animalitos se esparcieron por todo Tocopilla y se adueñaron de los alcantarillados y suciedades en general, gracias al cargamento de grasas que llegó desde Japón.

viernes, 3 de noviembre de 2006

Empresa contaminante se viene desde Calama a Tocopilla

Desde Hace aproximadamente dos años que se ve cierto movimiento de maquinarias y de personas en esta zona, Por lo que ha salido en los diarios, se trataría de una fundición de Acero que trabajaría con modernos equipos (lo dudamos) y que por lo tanto no contaminaría y sería la primera que de forma oficial se acoge a los beneficios de la Zona Franca Industrial, Zofrat.
Con la debida autorización del municipio, por ende, del Alcalde, ya estaria lista para entrar en funciones una desconocida empresa contaminante, denominada "Elinte" aca en Tocopilla, detrás de la Población Cardenal Caro, cerca de la Cancha deportiva "Magallanes". Según supimos, en Calama esta empresa fue rechazada por la población y por la autoridad local, siendo expulsados de esa ciudad, pero acá en Tocopilla se les ha dado "chipe libre" para instalarse y contaminar todo lo que se quiera o pueda. Nos parece muy injusto que esta empresa 'que no prestaría ningun beneficio a Tocopilla', se venga a instalar acá libremente y sin tomar una opinión siquiera a los vecinos de las cercanías, Ahora nos preguntamos ¿¿porqué esta empresa contaminante no se instaló en Barriles?? lo decimos, ya que tanto se ha hablado de ese lugar para las empresas que se acogieran a la ZOFRAT.
Fotografia cortesia del diario "La Prensa de Tocopilla".

lunes, 23 de octubre de 2006

Sepamos más de lo nuestro

Entretenida narración que extrajimos del Tococuentos número 5, escrita por Pedro Tapia Zuleta.
El egoísmo de los grandes empresarios privados, o la falta de visión futurista de las autoridades, muchas veces hacen fracasar o mantienen en suspenso el inicio de obras de bien común, aún cuando suele oírse decir, que la generosidad, altruismo y entrega de los poderosos, va más allá de lo razonable, en beneficio de obras sociales y de otra índole a favor de quienes la necesitan.
Este preámbulo, lo hago para referirme a un hecho histórico ocurrido en Tocopilla, allá por el año 1900, el cual es ignorado por la mayoría de la población actual.
Muchas veces nos quejamos por la falta de empuje, de la falta de audacia, de lo poco emprendedores que hemos sido y por ello estamos sumidos en lo que es hoy Tocopilla. Estas son afirmaciones erróneas, cuyo mentís lo corrobora la actitud decidida de quienes porfiadamente insistieron ante las autoridades municipales y dirigencia de la Compañia Anglo Chilean de la época.
Don Pablo Echiburu, distinguido hombre público de la localidad, en mayo de 1900, solicitó al municipio, autorización para instalar en Tocopilla una empresa de "Ferrocarril Urbano" o a "Sangre", como le llamaban en otras ciudades del pais, por el hecho que los carros se deslizaban por rieles a tracción animal.
No cabe duda que el proyecto era de gran interés, ya que hubiera significado una efectiva solución al problema de transporte público.
Echiburu fracasó en la ejecución de su proyecto, por las condiciones leoninas que le imponía la comisión de Hacienda de la Corporación Municipal, la que con poca visión futurista, redujo al máximo las posibilidades económicas del interesado, aún cuando la iniciativa había sido reconocida como "beneficiosa para la ciudad".
Pero en todas partes surgen hombres que no se dejan amilanar por la adversidad y, con su tenacidad a toda prueba, logran vencer la inercia pueblerina, las tramitaciones o intereses creados y terminan imponiendo sus ideas, cambiando de paso las consabidas costumbres negativas.
Tres años después, aparece el empresario don Vicente Guzmán, el mismo que el 25 de julio de 1901, había dado un paso de suma trascendencia en la evolución progresiva de Tocopilla, al inaugurar el famoso "Balneario Miraflores", construido en la Península de Algodones.
Él, también estaba interesado en dotar a nuestra ciudad de un "Ferrocarril Urbano", cuyas lineas se iban a extender desde el mismo Castillo hasta el Cementerio, en su deseo de establecer una linea de ferrocarril a "Sangre" (carros tirados por caballos) y el 2 de julio de 1903 solicitó a la honorable Corporación Municipal, la autorización correspondiente para extender la vía, en las calles de la población, con el siguiente recorrido: La estación de partida sería su propiedad, situada al sur de la población llamada Castillo Guzmán. Entraría al pueblo por la calle Prat hasta llegar a Sargento Aldea, por la cual entraría a 21 de mayo, la que recorrería en toda su extensión hasta el Cementerio.
Desde este punto, regresarían los vehículos por la misma línea hasta la calle Baquedano, donde se establecería un desvío. Por éste arrancaría una nueva línea hacia el mar, hasta calle Prat, tomando por ella hasta empalmar con la linea primitiva en el crucero de la calle Prat con Sargento Aldea. El pasaje costaría 10 centavos, por todo el recorrido.
El informe de la comisión fue positivo, recomendando al municipio acceder a lo solicitado; pese a ello, no fueron pocos los inconvenientes que hubo que superar, especialmente lo referente a las decisiones del gerente de la Compañía Anglo Chilean. Después de cumplir con todas las exigencias, el "Ferrocarril Urbano" fue entregado al servicio público el 16 de abril de 1904.
La inauguración del "Ferrocarril Urbano" constituyó un motivo de orgullo para la ciudad. Este sistema de transporte colectivo funcionaba en Santiago, Valparaíso, Antofagasta y otros centros importantes del país. Junto a la novedad, resultaba atractivo trepar a los carros y recorrer todo el trayecto por aquella módica suma.
Sin duda, este adelanto urbano fue positivamente valorado por las autoridades y la comunidad.

Zona de Balnearios, baños y quintas

Un lugar que los tocopillanos siguieron añorando después de la construcción de la Planta Eléctrica de la Chile Exploration Company en 1915, fué la zona de balnearios, baños y quintas, que pasó a poder de la empresa.
Ese era un lugar de moda y esparcimiento para fiestas y paseos. En esta zona, ubicada en le Península de Algodonales, existían variados atractivos, entre los cuales el de mayor prestigio y nombradía era el famoso "Castillo Guzmán", en los Baños Miramar.
Inaugurado el 25 de julio de 1901, este lugar de recreación y esparcimiento concentraba al numeroso público que se trasladaba a dicho lugar a disfrutar de picnic, paseos a la playa o como espectadores o apostadores en las carreras a la chilena, que a menudo se desarrollaban en la cancha del sector sur de la ciudad.
Otro lugar al aire libre, de masiva concurrencia, era la "Piedra del Casamiento", ubicada entre la Piedra del Camello y lo que es hoy Caleta Boy.
Allí se llevaban a efecto competencias de juegos populares y deportivas, de preferencia fútbol (1906-1918). El estadio Municipal fue inaugurado en 1931. También se jugaba fútbol en la cancha de La Colonia y Villa Covadonga.
Era tradicional que la fiesta final del carnaval se llevara a efecto en la planicie de la "Piedra del Casamiento", lugar donde las familias y público en general, llegaban movilizados en carretas y coches engalanados, o caminando, provistos de empanadas, chicha, vino, frutas, refrescos y golosinas diversas, que constituían la merienda, mientras duraba la festividad.
Lo importante era no perderse el espectáculo de la quema del Rey Momo, personificado en un gran muñeco de trapo relleno con aserrín y petardos, los que al explotar, producían una alegría colectiva en la concurrencia que se celebraba con vítores, urras y aplausos.
Finalizadas las fiestas del carnaval, todo volvía a la normalidad y los disfraces de payaso, arlequines, pierrots, brujas, damas antiguas, mascaritas, antifaces y otros atuendos femeninos, pasaban a ocupar un lugar en el baúl, a la espera de nuevas fiestas, el año próximo.
Las fiestas de Carnaval, eran una costumbre tradicional muy arraigada en nuestro pueblo, principalmente por el juego a la "Chaya", que convocaba alegremente a la mayoría de jóvenes y adultos, en calles y plazas, seguida de bailes sociales y populares.
Estas eran algunas de las actividades recreativas y lugares de esparcimiento de los tocopillanos de aquella recordada época, en la que las estudiantinas, murgas y comparsas hacían que la gente expresara jubilosa su alegría.
Con menos elementos materiales, pero con mucha creatividad, se lograban resultados sorprendentes, superando cualquier dificultar que pudiera opacar los sanos propósitos de disfrutar "a concho" y ser felices, compartiendo la alegría con la comunidad, que mayoritariamente concurría a las fiestas de antaño, en las cuales la "Piedra del Casamiento" fue un lugar preferente.
(Fuente de información: La Historia de Tocopilla de Juan Collao Cerda)

domingo, 22 de octubre de 2006

El Chupacabras en Tocopilla (V)

Chupacabaras dejó secas a 19 gallinitas ponedoras de Tocopilla.
Así lo decía el diario "La Cuarta" en su edición del dia 19 de Mayo de este año 2006.
Más triste que un bolero se quedó ayer el agricultor de Tocopilla, Mario Covarrubias Cortés (72), luego de descubrir que el temido Chupacabras se sirviera de un paraguazo a todas su gallinitas, en su rancha del sector de las 3 Marías... Leer Más...

Volantines tocopillanos Algo para recordar

Narración extraída de la Revista Oficial del Centro hogar tocopillano en Santiago, con fecha Septiembre de 1999.
La espuma desprendida de las olas azotadas por el viento en las rocas, nos daba de lleno en el rostro refrescando nuestra caminata. Orillando la playa nos dirigíamos a Mamilla, esa sabrosa vertiente hija del río Loa y cuyas aguas de sabor salobre calman la sed de pescadores y aventureros como nosotros. Más de un rancho abandonado y seguramente albergue ocasional de algún necesitado, nos recibían como manifestando alegría por nuestra visita.El puerto sólo se identificaba por las altas chimeneas de la Central Eléctrica no permitiendo la Cordillera de la Costa la visión de la ciudad. Al norte, el Cabo Paquica. Y más al norte, la desembocadura del Loa.

Las cañas que íbamos a buscar, objeto de nuestro viaje, yacían la mayoria descansando o agonizando sobre el tejado de la ranchería levantada por no sé quienes. Necesitábamos las más secas por ser más livianas para el transporte a pleno hombro, para la confección de volantines.

No era atendible el negocio en ir a buscar cañas a Mamilla, pero si la aventura. En el camino más de una vez nos encontramos con el Roto de la Mula, soberbio nadador mariscador. Más de un tocopillano le debe la vida a ese personaje. Años después, un calambre lo traicionó pereciendo ahogado.

Pescadores furtivos divisábamos desde lo alto del cerro de la vertiente Mamilla haciendo mal uso de la dinamita.

Duro el regreso. Además del pesado fardo de cañas sobre el espinazo, también cargábamos a dos jinetes del Apocalípsis: Hambre y sed.

En Caleta Vieja nos esperaba el Flaco Choche que nos proporcionaba el comestible y bebestible para continuar hasta la ciudad. Ahora, con la materia prima en nuestro poder, a comprar colapi, papel de seda y a fabricar volantines para todos los gustos. Tricolores, Pechuga, cara y sello, unicolor, chilenos, en fin, con 12 años de edad ya olíamos el Libre mercado (increible ¿no?).

La Manchuria, nuestro barrio, no tenía alumbrado público ni menos hogareño. La luna, conocedora de la pobreza que nos rodeaba encendía todos sus motores alegrando nuestra desprejuiciada infancia con su plateada luminosidad. Saltábamos, cantábamos, tocábamos guitarra con las chiquillas hasta que las mamás salían a las puertas de sus casas gritando: ¡Ya chiquillas y chiquillos es muy tarde, a acostarse que puede salir la viuda!.

La plena producción volantinera satisface las inquietudes de toda la chiquillería.

¿Cómo quieres el volantín? ¿Chupete o con cola? ¿hilo del ocho o del cero? ¿hilo curado o sano?.

Ahora al cerro a encumbrar aprovechando el excelente viento en los cerros tocopillanos. No debemos encumbrar más allá de las 8 de la noche porque la camanchaca nos moja los aparatos, se ponen pesados y se destruyen. Además, tenemos que ir a las Veladas Artísticas que realiza el Choña Rivera en el local de los Terrenos fiscales, al ladito de la casa del Ganga Bugueño en la calle Guillermo Matta.

Todos éramos artistas. Esa gran cualidad del Choña para convertir a cualquiera de nosotros en actores y… cantantes. Claro que había cantantes que todos los jueves (ese era el dia de las veladas), con la misma canción. Y además los Orrego (el Hugo y el Choche), como habían visto los ensayos de las obras a presentar iban anunciando lo que sucedería en la trama. Nosotros, permanecíamos en silencio y nuestra venganza era agarrar a peñascazos sus casas a la salida de la función.

Estábamos en plena Segunda Guerra Mundial y Tocopilla por ser un puerto altamente estratégico según los yankis, junto con instalar tremendos cañones costeros para defensa de un posible ataque (?), a las ampolletas del alumbrado público se les colocó una pantalla de cartón para así dificultar el blanco que era nuestro puerto. Esta semi penumbra originada por las pantallas susodichas conspiraba con nuestras maldades.

Todo era encanto en nuestro puerto. La única rivalidad existente era quién nadaba mejor o buen futbolista, condiciones que apreciaban mucho las chiquillas haciendose acreedoras ellas a un bombón o una raspadilla por parte del favorecido. Invitación al teatro no corría porque como eramos cabros chicos la mayoria, las chiquillas mayores no nos inflaban. Además estaba latente el temor que apareciera la Viuda.

Ya un poco mayorcito en una salida nocturna del Teatro Nacional, de gratísimos recuerdos, frente a la Casa Yñesta, habia una pizarra con una noticia “Hoy 3 de Septiembre de 1939 empezó la Guerra Mundial. Francia e Inglaterra le han declarado la guerra a Alemania e Italia”. Japón, ni chus ni mus, aún.

Don Oscar Magnan, mi recordado profesor, nos explicó que significaba todo eso. La tragedia jóvenes. El hambre. Los abusos. Los muertos.

Lo que temíamos nosotros era que no fuera a llegar un cañonazo al cerro donde encumbrábamos volantines.

Estudian cobrar peaje a camiones con sustancias peligrosas

Otro estudio que no dio sus frutos, Se dijo en su dia que cobrarían Peaje a los camiones que transitan con sustancias peligrosas por las calles de Tocopilla, en este caso por la Avenida Arturo Prat. Lo decía "La Prensa de Tocopilla" un dia jueves 4 de enero del año 2001 y hasta el momento estos vehículos pesados con carga peligrosa, siguen pasando libremente por Tocopilla, Ojalá nunca ocurra un accidente que se tenga que lamentar.
La encargada del Comité Comunal de Emergencia, Myriam Carvajal, declaró que se espera pasar la cuenta a las empresas transportistas que recorren la localidad con sustancias peligrosas, ya que el municipio no está en condiciones de asumir los gastos en forma individual en caso de un accidente con derrame. Leer Más...

sábado, 14 de octubre de 2006

Tacos Causan malestar y resignación

Por el año 2001 salía esta noticia en el diario "La Prensa de Tocopilla" con fecha sabado 10 de febrero de ese año, en donde se dejaba ver la molestia por parte de los conductores de vehículos de Tocopilla, que fueron en el fondo los más perjudicados, quedando sus vehículos con daños en sus sistemas de suspensión y neumáticos (por cerca de DOS años circulando en pésimas condiciones). Congestión Vehicular se forma en sector de puente SQM.
Molestia, pero también cierta resignación, manifestaron los conductores que a diario se ven enfrentados a un enorme taco por las obras que se realizan cerca del puente de la empresa SQM, único acceso entre los sectores norte y sur de Tocopilla.
Los trabajos se enmarcan en el proyecto de ampliación de la Ruta 1 a través de la avenida Arturo Prat, y ejecutadas por la empresa Con Pax, teniendo una inversión superior a los mil 500 millones de pesos.
Sin embargo, las labores que se realizan en el sector del puente están a cargo del subcontratista Juan Carlos Caroca, cuyos trabajadores tienen que lidiar con los constantes reclamos de algunos choferes.
Según señaló uno de los empleados, quien prefirió no identificarse, es casi ya una rutina tener que soportar los insultos de algunos conductores que pasan por el lugar.
"Nos faltan el respeto tupido y parejo, descargando toda su impaciencia con nosotros, cuando sólo efectuamos una labor que a la larga será en bien de la comunidad".
Agregó que las mayores dificultades acontecen en la noche, cuando los choferes no respetan la señalización para detenerse y se encuentran en lo angosto de la vía con otro vehículo que viene en sentido contrario.
"Los más irresponsables son algunos colectiveros, quienes no tienen mucha paciencia para esperar su turno".
Indicó que comprenden que esta época es la peor para efectuar este tipo de trabajos, por el constante flujo de buses y camiones que transitan por el camino costero.
CHOFERES
Algunos de los conductores que deben soportar largos minutos de espera para avanzar, manifestaron su malestar porque estas obras se realicen precisamente en verano.
Eduardo Campos expresó su rechazo y culpó a la autoridad ante lo que consideró una mala planificación del tiempo de desarrollo de esta obra.
"Comprendemos que debemos armarnos de paciencia, pero encuentro que hay mejores épocas para llevar a cabo estos trabajos, no cuando todos están de vacaciones y la gente se moviliza a la playa diariamente".
Una opinión distinta formuló Constanza Beretta, quien dijo que lo primero que se debe pensar es en el beneficio que esta obra significará para la ciudad.
"El progreso trae ciertas incomodidades en un principio, pero después nos entregará una vía por donde podremos circular con mayor seguridad y rapidez".

Capturaron Tiburón de casi Cuatro metros

Sorprendente noticia que salía en el diario "La Prensa de Tocopilla" el dia viernes 9 de febrero del año 2001.
En sorpresa se convirtió el trabajo que un grupo de trabajadores tocopillanos de alma de mar realizaba frente a las costas del puerto, cuando capturaron un tiburón de casi cuatro metros que quedó atrapado en el espinel.
De acuerdo a los datos entregados por uno de los pescadores, Arturo Pérez. se encontraban a varias millas de la costa cuando sintieron que en la lineaa de captura había caído un tiburón de grandes dimensiones, "pero nunca pensamos que sería tan grande", explicó.
El peso del animal era tanto, que no pudieron sacarlo durante la noche, "así que tuvimos que esperar hasta el otro día, porque el tiburón estaba muerto y llegó a 300 metros de profundidad, por lo que tuvimos que trabajar varias horas para subirlo al bote".
De esa manera, junto a Carlos Pérez, lograron subir el tiburón y retornar a Tocopilla, no sin antes avisar de la captura, por lo que el muelle local se llenó de curiosos que llegaron a observar el verdadero trofeo de guerra.
LLEGADA
Por lo que al llegar la embarcación "Perico", algunos turistas y varios tocopillanos estuvieron presentes en el desembarque, quedando sorprendidos por las dimensiones del tiburón, de casi cuatro metros y 200 kilos.
Según los pescadores que estuvieron en el lugar, es poco común que tiburones de ese tamaño se encuentren cerca de Tocopilla.

martes, 10 de octubre de 2006

Toco-Tocopilla

Reportaje aparecido en el suplemento "Revista del Domingo" del diario "El Mercurio" con fecha 9 de diciembre de 1990.
El Ferrocarril Tocopilla-Toco ya no llega a Toco... La estación murió con el salitre, pero el tren sigue vivo cargando cien años. Ahora une Tocopilla y Pedro de Valdivia por los rieles y durmientes del árido desierto de la Región de Antofagasta. En estas páginas, nos entrega su historia.
Texto y fotografías: Ana Victoria Durruty.
Acabo de cumplir cien años. Nací un 15 de noviembre de 1890 en Tocopilla... Aunque viejo, aún soy útil: el año pasado transporté un millón 290 mil toneladas, casi un millón más en 1899... Algunas penas han dejado profundas huellas en mi fisonomía, pero soy feliz, tan feliz como puede sentirse mi duro corazón de acero. Y tengo muchas anécdotas que contar, simplemente porque formo parte de la historia del salitre.
Mi parto no fue fácil. Una ley especial, aprobada por el Congreso en enero de 1888, otorgó la concesión de terrenos necesaria para iniciar mi construcción... Pero desde mucho antes, mi padre intelectual, el ingeniero inglés Eduardo Squire, luchó por mi gestación. Tras el término de la guerra del Pacífico, en 1883, el Gobierno chileno le reconoció la propiedad de 42 estacas mineras en el sector Toco y, en lo que se denominó "Transacción Squire", se autorizó adicionalmente la construcción de un tren desde el puerto de Tocopilla hasta esas dependencias salitreras (ver mapa). Así, me bautizaron Ferrocarril Tocopilla-Toco (FFTT).
Ahora cada vez que me alejo del mar, avanzando por los cerros de la cordillera de la Costa, entre bouganvilleas de tonos originales, recuerdo esos primeros dias... Entonces el puerto apenas albergaba unas cinco mil almas. Hoy el orgullo inunda mis sentimientos metálicos cuando lo veo convertido en una ciudad, gracias, en cierto modo, a mi propio esfuerzo.
Aquellos eran tiempos difíciles, casi a puro ñeque y pólvora construyeron un sendero serpenteante y abrupto. Muchos dieron su vida antes de culminar el tramo que une Tocopilla y la Estación Tigre: 39,22 kilómetros, siempre en subida. Eran ingleses, coolies (esclavos chinos de Cantón) y chilenos traídos desde el Norte Chico. Aún los recuerdo agradecido. Ellos fueron armando terraplenes, instalando durmientes y rieles por donde luego pasarían las máquinas importadas desde Inglaterra.
Luis Aguilera, quien conduce la locomotora General Electric número 606, es coterráneo de algunos de ellos. Ovallino, el maquinista ha realizado unos cuatro mil 200 viajes de ida y vuelta. Tras siete años, conoce de memoria las estaciones.
¡Tuuuuuuu! ¡Tuuuuuuu! Me gusta atravesar las calles y casas del colorido Tocopilla, donde sus niños aprenden primero que nada a decir "tren". Así le sucedió a Luis Aguirre, el ayudante de máquina en la 606.
Durante los primeros años, después de mi solemne (algunos afirman que hasta vino el presidente Balmaceda), yo temblaba entero al trepar por pendientes de hasta cuatro por ciento. Subía -¡y aún subo!- cuatro metros cada cien. La presión y el vapor me agitaban nervioso... No duró demasiado. Allá por el año 1927 me pusieron electricidad...
Pero todavía conservo la capacidad de asombro. En este tramo soy uno de los trenes montañosos más empinados del mundo, si no el que más y, como bien recuerda Heriberto Ramírez, jefe de Operaciones de tráfico Tocopilla-Tigre, todos los ferrocarriles restantes tienen una tolerancia de "apenas" el tres por ciento.
Por los años de la década del veinte me construyeron un nuevo ramal, de la Estación Tigre a la oficina María Elena, que en esa época se llamaba Coya Norte. Así, entre Tigre y María Elena florecieron estaciones para aprovisionarme de agua, mientras cruzaba -sudoroso y humeante- la enorme pampa. La gente comenzó a juntarse en torno a mis abrevaderos y nacieron Colupito, Cerrillos y Tupiza.
Poco duraron... Desde 1955, me autoalimento, obtengo mi propia potencia eléctrica del petróleo... Adiós Colupito, adios Cerrillos, adiós Tupiza, Gracias... Allí solo quedan historias, incluso de amor, como la de Guillermo Contreras, el palanquero. Su padre trabaja conmigo desde hace tres décadas y su abuelo materno hizo lo mismo hasta que nos dejó en Arica. Su madre, Teresa, conquistó a su "taita" en Colupito.
Después de María Elena me agregaron nuevos ramales: La Estación Vergara y el empalme con la via longitudinal norte-sur en Mirage (ésta debe su nombre a la traducción francesa de un fenómeno frecuente en la zona: los espejismos). Más tarde, en 1929, quedé conectado a la oficina Pedro de Valdivia. A veces viajo hacia la costa con el maquinista Samuel González, quien conduce la locomotora 21 que arrastra 408 toneladas (ocho carros de salitre y doce contenedores de petróleo para ser recargados). Samuel nació en Calama, pero entró al colegio en la oficina Rica Ventura y continuó luego en Prosperidad.
Hoy entre Tigre y Toco no queda nada. Y en las estaciones intermedias, uno que otro árbol seco, montones de piedras y zapatos viejos chamuscados por el sol. Hasta los ladrones se han aprovechado de mi soledad, robándome parte de mi columna metálica, mis rieles eternos ya opacados por la sal y el calor. Por eso quienes me cuidan han tenido que levantar parte del tendido.
El salitre sintético marcó la fecha de mayor dolor, hasta que en 1957 realicé mis últimos viajes de Tigre a Toco... Así es la vida en estas latitudes, por eso mi historia es como la historia del salitre.
Hoy, pese a la seguridad que ofrezco, los "gringos" y otros extranjeros que me visitan se siguen poniendo nerviosos cuando bajan la montaña en mis locomotoras de 1927, de setenta toneladas y 750 caballos de fuerza.
Son buenos tiempos, no lo puedo negar. Incluso están remodelando algunos carros para festejar mi centenario... Soy un viejo útil.

viernes, 29 de septiembre de 2006

Domingo Latrille y su visión de Tocopilla

Texto extraído del suplemento titulado "Tocopilla ciudad de gran impulso turístico y comercial" que adjunta el diario "La Prensa de Tocopilla" este dia 29 de septiembre de 2006.
Su espíritu Aventurero y Tesón hace fundar el puerto en 1843, visionando la prosperidad que hoy pasa el puerto.
Desde la hermosa e iluminada Francia arribaron a Valparaíso los hermanos Máximo y Domingo Latrille Lostaneau, visionarios que contribuyeron a forjar grupos sociales de enorme trascendencia en nuestra historia nacional.
En la lejana Francia, quedaban Jean Pierre y Francoise, sus padres. Sin embargo, el llamado de su tierra fué más poderoso, y Máximo volvió a su terruño galo, pero Domingo se quedó en estas tierras, trasladándose al norte.
Su verdadero nombre era Dominique y nació un 23 de febrero de 1817, llegado a la zona a los 22 años, con el afán de búsqueda y asombro ante este desierto hostil e implacable.
Estando en Mejillones descubrió covaderas hacia 1841, pero por conflictos con una empresa peruana abandona el lugar y en 1842, se le encuentra explorando minas de cobre en Gatico, Punta Blanca, Duendes y Tres Puntas.
Inauguración Oficial
Fue entonces cuando su espíritu aventurero lleva a Latrille a solicitar al prefecto de Cobija, Andrés Maria Torricos, la fundación de un puerto que contara con la autorización boliviana. Logró con tesón su objetivo y con la asesoría de su amigo Mariano Benavides, se realizó la ceremonia oficial de inauguración el 29 de septiembre de 1843 en Punta Algodonales, sector también llamado Quebrada Honda, Rincón del Diablo, Caleta Duendes, El Desolado y definitivamente Tocopilla, la "Capital de la Energía". Antes que José Santos Ossa, luego de darse cuenta que la salinidad que cubría la gran extensión del desierto, era el caliche.
En su vida personal, Latrille contrajo matrimonio con la dama peruana, Juana Petizco Ramírez (Descendiente del militar español José Petizco y de la también peruana doña María Teresa), naciendo de esa unión los hijos Francisco, Máximo, Juan Valentín y Domingo Bernardo.
Luego de vivir en Caleta Duendes, se alejó de su esposa e hijos y residió en Huatacondo hasta su muerte el 26 de mayo de 1891, al interior de Iquique. Mientras que su casa en Tocopilla, aún perdura y se ubica en calle San Martín, a un costado de una conocida embotelladora.

jueves, 28 de septiembre de 2006

Domingo Latrille La gran deuda pendiente.

Este artículo lo hemos extraído de la Revista oficial del Centro Hogar Tocopillano en Santiago, con fecha Septiembre 2006, al cumplirse 163 años de nuestra ciudad.
¿Será una utopía pensar en un Mausoleo para Domingo Latrille al celebrar el Bicentenario de la Independencia de Chile? ¿y trasladar sus restos desde Huatacondo a Tocopilla?
Gran pregunta que nos hace Don Pedro Tapia Zuleta, y con gran detalle nos recuerda del anhelo frustrado que tuvieron los Directivos del Centro Hogar Tocopillano desde la publicación de la revista del año 1966, nos relata las sesiones Municipales donde los regidores Carlos Bigliomini, Julio Fernández, promueven este proyecto junto al Alcalde Alberto Carrizo, quien publicó junto al escritor nortino Andrés Sabella, los escritos que demostraban que la fundación de Tocopilla habia sido del ciudadano Domingo Latrille, el 29 de septiembre de 1843. A continuación queremos dar testimonio relatado por uno de sus descendientes y actual investigador.
Viaje al pasado familiar de Eduardo Owen Palma un Tataranieto de nuestro Fundador.
Mi familia y yo hemos vivido en Australia por más de 34 años. A comienzos de la década del 80, mi hija le escribió a su abuelo paterno, Juan Valentín Owen Latrille, preguntándole acerca del origen de nuestra familia. Mi padre le contestó contándole acerca de los Owen, quienes originalmente eran de Gales, en Gran Bretaña. La carta, guardada con mucho cariño por mi hija, volvió a ver la luz del dia como 17 años después, cuando yo me acababa de retirar de mi trabajo de profesor primario. Debido a que ahora "me sobraba el tiempo", ésta terminó motivando mi interés por investigar en mayor detalle lo que mis antepasados hicieran en Chile, especialmente la vida y obra de Dominique (Domingo) Latrille Loustauneau y sus descendientes.
Después de más de cuatro años de investigación y gracias a muchos familiares y amigos que me consiguieron (y enviaron) todo tipo de información, quisiera compartir con ustedes lo que yo llamo "cuatro hechos históricos significativos que yo desconocía en la vida de los miembros de la familia Latrille Loustauneau y sus descendientes".
1. El General Guillaume Latrille de Lorencez y su hijo Charles Ferdinand Latrille, Conde de Lorencez.
Este general francés figura, junto a otros 599 nombres de héroes franceses (encabezados por el nombre de Napoleón Bonaparte mismo), en el Arco del Triunfo de París.
Guillaume Latrille de Lorencez nació en Pau, Pirineos Atlánticos Franceses, el 21 de abril de 1772, ciudad donde también naciera Dominique (Domingo) Latrille Loustauneau el 23 de febrero de 1818, y era pariente del Fundador de Tocopilla.
El general de División Guillaume Latrille, Conde de Lorencez, Barón del Imperio, falleció el primero de octubre de 1855, a la edad de 83 años (año en que naciera Domingo Bernard, hijo menor de Domingo Latrille Loustauneau y Juana Petisco Ramírez, en Cobija, puerto en ese entonces boliviano).
Charles Ferdinand Latrille, Conde de Lorencez
General francés nacido en París el 23 de mayo de 1814, hijo de Guillaume Latrille de Lorencez y Caroline Nicolette Oudinot, hija del Duque de Reggio y pariente de Domingo Latrille Loustauneau.
En 1872 Dominique Latrille Loustauneau se fue a vivir a Huatacondo, solo, sin su familia... Según cuenta el abogado Alfredo Latrille Torres, bisnieto de Máximo (o Roque) Latrille Petisco, una de las descendientes directas de Charles Ferdinand Latrille, Conde de Lorencez, mantuvo correspondencia con una de sus primas chilenas, Julia Beatríz Latrille González, hija de Máximo Roch (o Roque) Latrille Petisco y Rosalía González Rojas y nieta de Dominique (Domingo) Latrille Loustauneau y Juana Petisco Ramírez. En su familia, aún se conservan algunas de sus cartas.
2. Máximo Roch (o Roque) Latrille Petisco, la pintura fue su talento Artístico
Máximo Roch Latrille Petisco segundo hijo de Domingo Latrille Loustauneau y Juana Petisco Ramírez.
3. La Muerte Heróica de un Descendiente de Domingo Latrille Loustauneau Peleando por Francia en la Segunda Guerra Mundial
El año 1943, en europa, "fallece en el campo de honor" el piloto Mario (Marius) Latrille Soto, nieto de Máximo Roch Latrille Petisco, combatiendo por los aliados (Francia) durante la Segunda Guerra Mundial.
4. La Ubicación de la Tumba de Domingo Latrille Loustauneau en el Cementerio de Huatacondo
En mayo de 2004, le escribí al Alcalde de Pozo Almonte, señor Augusto Smith Marín, preguntándole acerca de la ubicación de la tumba de mi tatarabuelo. Unos meses después (agosto), me contestó diciendome que habia ubicado la tumba en el Cementerio de Huatacondo. Además, me envió unas fotos del pueblo pre-cordillerano y tres fotos de la que, según él, es la tumba de Domingo Latrille Loustauneau.
Daniel Chirino Suñer, destacado historiador tocopillano, antes de septiembre de 2006, viajará a Huatacondo y Pozo Almonte a investigar sobre la tumba y más anécdotas de nuestro fundador.
Después de estos 48 meses de investigación, he logrado reunir casi cien páginas de información, fotos y copias de documentos que, en forma de CD-Rom, le enviaré al Centro de Hijos de Tocopilla de Santiago. Lo único que no he logrado obtener de mi larga lista, es una foto de mi bisabuelo Domingo Bernard Latrille Petisco, hijo menor de Domingo Latrille Loustauneau y Juana Petisco Ramírez. Tal vez alguna de las personas que lea este artículo me pueda ayudar a obtenerla.
Eduardo Owen Palma
Hijo de Juan Valentín Owen Latrille, nieto de Juana Isabel Latrille Almendares, bisnieto de Domingo Bernard Latrille Petisco, tataranieto de Dominique (Domingo) Latrille.
Pese a que han transcurrido 115 años desde su fallecimiento, acaecido el 26 de mayo de 1891 en el pueblo de Huatacondo en Tarapacá y a 40 años del acuerdo de la Municipalidad de Tocopilla, aún es tiempo de saldar la "Deuda de Gratitud" que tenemos pendiente con el fundador de la "Madre del Viento".

jueves, 21 de septiembre de 2006

Atractivos Ejercicios en los 100 años de Tercera Compañía

Pequeño párrafo que salía en "La Prensa de Tocopilla" en su edición del dia martes 21 de Diciembre de 1993.
Ante la presencia de gran cantidad de público, bomberos realizaron ejercicios de simulación en el combate contra el fuego. Este se efectuó en la explanada que está ubicada frente al Mercado Municipal.
El motivo de estos ejercicios obedecieron a que la Tercera Compañía de Bomberos se encuentra celebrando los 100 años desde su creación.
Esta actividad que se llevó a efecto el sábado último en horas de la tarde, estaba inserta en una de las tantas que se programó para celebrar dignamente los 100 años.
Además en los ejercicios participaron los voluntarios de la Cuarta Compañía, como una manera de rendir un homenaje a sus compañeros de tantas actividades que han realizado juntos, arriesgando en el mayor de los casos incluso la vida por ayudar al que lo ha solicitado.
Aplausos sacaron en varios pasajes los voluntarios, al realizar algunos ejercicios con gran rapidez y precisión.
Por la noche y con la presencia de las autoridades de la ciudad y la oficialidad del Cuerpo de Bomberos de Tocopilla, se realizó la ceremonia solemne en los salones del Cuartel General.
En esta oportunidad se entregaron varias medallas por años de servicio, las que fueron recibidas con gran satisfacción por quienes se hicieron merecedores a ellas.

viernes, 8 de septiembre de 2006

Apuntes Historicos sobre el Salitre

Extracto de la revista "14a Memoria Anual" de SQM del año 1985.

Las primeras aplicaciones prácticas del salitre, a través de la historia de la humanidad, están directamente relacionadas con los explosivos. En efecto, la pólvora se fabricaba mezclando azufre, carbón y salitre. Los antiguos no conocían bien las cualidades explosivas de la pólvora, por tanto se le utilizaba en la guerra, con combinaciones incendiarias. Entre ellas estaba el famoso "Fuego Griego" que los romanos usaban lanzándolo contra las posiciones enemigas con gigantescas catapultas. Este elemento incendiario estaba compuesto por azufre, resina y salitre. Los chinos conocían la pólvora, mas no la usaban con fines bélicos, sino que en la fabricación de sus fuegos artificiales que eran verdaderas maravillas pirotécnicas.
Marco Polo, cuando retornó a Europa de su fabuloso viaje, dio fe de estas maravillas.
Desde antes de la era cristiana, los alquimistas chinos y árabes fabricaban pólvora, empleando, fuera de carbón y azufre, el nitrato potásico, de gran abundancia en las llanuras de China.
Los europeos comenzaron a usar la pólvora desde el siglo XIV, aunque ya conocían el nitrato potásico desde la baja Edad Media.
Descubierta América, e iniciada su conquista y dominio, el salitre del sur de ésta era tan valioso como el oro. Con él se fabricaba el explosivo para trabajar las minas y para defenderlas.
La pólvora en Chile se fabricaba con salitre de Tarapacá, azufre de la alta cordillera (Tacora) y carbón elaborado con algunas escasas manchas boscosas de la zona. El problema surgió cuando se agotaron estos, mas la solución llegó a traves de la gran cantidad de troncos derribados y enterrados en la Pampa del Tamarugal, desde tiempos inmemoriales. Los indios sabían donde estaban estos verdaderos "yacimientos de madera". A estos baqueanos se les llamaba "cateadores de leña".
Cuenta el escritor don Oscar Bermudes Miral, en su notable "Historia del Salitre", una sabrosa crónica: "En cierta ocasión, atravezaban dos indígenas las arideces de la pampa y al llegar la noche resolvieron acampar donde ya la fatiga les cortó el paso. El frio de aquellas soledades les obligó a hacer fuego, pero cual no sería su sorpresa cuando la débil fogata tomaba brios y propagando sus llamaradas, hacía arder la tierra con inesperados chisporroteos. Llenos de pavor, los pobres indígenas creyeron ver en ello la intervención de un espíritu diabólico y, presas del pánico, emprendieron precipitada fuga que terminó con los primeros rayos del sol. Se dirigieron a la parroquia de Camiña (Departamento de Tarapacá) y contaron al cura lo que les había pasado. El cura creyendo también algo sobrenatural, llegó hasta el sitio del suceso. Después de bendecir el lugar y rezar varias oraciones, regresó a la parroquia trayendo algunas muestras de la tierra que los indígenas habian visto arder; después de analizarlas, pudo comprobar que se trataba nada menos que de riquísimo mineral con alta ley de nitrato de potasio, poderoso componente en aquel entonces, empleado en la fabricación de la pólvora. Los restos de las muestras las arrojó el cura en el patio de la parroquia, notando al poco tiempo, con gran sorpresa, que las plantas próximas tomaban proporciones gigantescas; hizo el ensayo en hortalizas y obtuvo el mismo maravilloso resultado.
Entonces el cura recomendó a sus feligreses que emplearan este abono, que él llamó tónico para el reino vegetal".

En las postrimerías de nuestro periodo colonial, en 1809, el eminente sabio alemán, don Tadeo Haenke, contribuyó al desarrollo de la explotación salitrera en la zona Norte de Chile, al proporcionar un procedimiento para conversión de nitrato sódico en nitrato potásico, dando gran auge a la producción en Zapiga, Pampa Negra y Negreiros.
Desde esa fecha hasta nuestros dias, durante 177 años, el caliche de las pampas nortinas, transformado en salitre, ha estado enriqueciendo las tierras de cultivo, en nuestro país y en los más variados puntos del orbe. Lejanos ya parecen esos dias, en que el primer buque cargado con salitre, zarpó hacia el viejo mundo. Fué un 21 de julio de 1830, cuando un velero de cuatro palos, tras afanosa navegación, llegaba al puerto de Liverpool. Al enterarse las autoridades locales del cargamento que llevaba la nave, no le permitieron atracar a los muelles por considerar el salitre altamente peligroso. Comprensible temor, porque en aquellos tiempos y en esas latitudes, este producto era sinónimo de pólvora; por lo tanto, explosión y muerte.
Algunos años después en Chile, se fundó la Sociedad Nacional de Agricultura, que fue gran impulsadora del uso del salitre como fertilizante en los campos chilenos. Esta iniciativa, tuvo que vencer la oposición de quienes sostenían con ardor y entusiasmo la peregrina tesis de que las tierras de nuestro pais no necesitaban abono para producir.

domingo, 3 de septiembre de 2006

¡Más vale tarde que Nunca!

Crearían Playas y Piscinas Artificiales.
Este llamativo título se mostraba en un artículo del diario "La Prensa de Tocopilla" del dia martes 21 Febrero de 1995... o sea algo asi como 10 años se demoraron en crear una playita artificial en nuestra ciudad... pero... ¡Más vale tarde que Nunca!
Un estudio técnico, económico y arquitectónico para la habilitación de playas artificiales en Antofagasta, Tocopilla y Taltal está patrocinando el servicio Nacional de Turismo, Sernatur de la Segunda Región.
La información fué dada a conocer por la directora regional del organismo, Gerda Alcaide López, quién señaló que el proyecto cuenta con una inversión de 4 millones 760 mil pesos para cada una de las tres comunas favorecidas. Su objetivo es desarrollar un estudio de carácter que permita manejar los antecedentes necesarios para la inversión que requiere habilitar playas y piscinas en lugares con escasas posibilidades costeras naturales.
Según Gerda Alcaide, los principales enclaves costeros están emplazados en costas rocosas, situación que impide la puesta en valor de la costa de la Segunda Región, sobretodo para los países del noroeste argentino y Bolivia.
Por ello, dijo Gerda Alcaide, Sernatur, con recursos aportados por el Fondo Nacional de Desarrollo Regional para Antofagasta y Tocopilla, más aportes de la Corporación de Fomento a la Producción, Corfo, para Taltal, concibió esta tarea como una herramienta eficaz para fijar para fijar un plan de acción y pautas para la intervención específica de escenarios naturales costeros.
La directora regional del Sernatur recalcó la importancia de este proyecto para los convenios de integración con los países limítrofes, basados en las políticas emanadas por el Gobierno Regional.
En este sentido, agregó que las ventajas comparativas que la Segunda Región ofrece en relación a los países vecinos, en la actualidad no son aprovechables con eficiencia, por ello es necesario desarrollar proyectos de esta magnitud.

Un trabajo rápido y efectivo

Pequeño párrafo que aparecía en la revista "Pampa" en su edición N° 9 de Diciembre de 1948, fíjense en un articulo similar titulado "Accidente de la Locomotora 604" un poco más abajo...
El 31 de Agosto de 1948 será en el futuro una fecha que tendrá que recordarse con mucho pesar, pués fue cuando una mala estrella tronchó tres vidas aún jóvenes y que prometían mucho a la economía del país; además, sucedió el segundo accidente de fatales consecuencias en la vida del Ferrocarril de Tocopilla al Toco.
Los fierros retorcidos, los carros destrozados y una máquina eléctrica de vital importancia para la industria quedaron en el terreno tendidos como mudos testigos de una tragedia ferroviaria.
Pero al poco tiempo, la mano laboriosa del hombre, con la inteligencia aguzada de los ingenieros, fué limpiando el terreno hasta quedar todo en orden, como antes. Los carros aprovechables fueron arreglados, y la máquina eléctrica, como hemos dicho, de vital importancia para la industria, reparada en un tiempo record, 12 dias, ahora sigue prestando los mismos servicios de antes y en las mismas condiciones. Ardua ha sido la labor de jefes, empleados y obreros de la Maestranza del Ferrocarril, pero tambien grande es ahora la satisfacción al poder presenciar el trabajo terminado.
Felicitamos a todos por parejo, tanto al que sacrificó horas de sueño por buscar solución al problema como a los que dia a dia y noche a noche no dejaron un momento las herramientas hasta dar por terminada su labor y cumplir con los deseos de los jefes, de disponer cuanto antes nuevamente de ese material, para atender los servicios del ferrocarril.

*Fotografías 1 y 2 Antes: La locomotora eléctrica N° 605, tal como quedó en el accidente ferroviario del kilómetro 22.
Y Después: La locomotora eléctrica N° 605, después de salir de la maestranza y efectuadas las reparaciones, que duraron 12 dias, rodeada del personal de empleados y obreros que hicieron el trabajo.

sábado, 2 de septiembre de 2006

''Mano dura contra la contaminación'' en Tocopilla

"Yo estando como futuro alcalde pondré mano dura contra la contaminación en Tocopilla"... Gentileza del sitio www.mundomaritimo.cl
Palabras del actual alcalde Moyano, cuando todavia no ejercía su mando, es curioso darse cuenta que el nunca ha movido un dedo por frenar o 'al menos' disminuir la Contaminación en Tocopilla, ni lo hará. Recordamos este pequeño "condoro" de la empresa Electroandina hace un tiempo atras.
La empresa Electroandina mitigó la contaminación utilizando mangueras de alta presión sobre el carbón fino, que provocó el lamentable desastre ambiental. Bastante molesto se mostró el alcalde electo de Tocopilla y actual concejal de la comuna, Luis Moyano Cruz, sobre el reciente desastre ambiental que afectó el pasado miércoles al puerto salitrero, cuando ocurrió una emisión anormal de polvo de carbón en pleno descargue de este material en el muelle mecanizado de la empresa Electroandina... Leer Más...

jueves, 31 de agosto de 2006

Tocopilla, Terruño inolvidable

Este relato apareció escrito en la revista de Tocopilla oficial del Centro de hijos en Santiago, escrito por Pedro Tapia Zuleta, con fecha Septiembre de 1999.
Hace 60 años, después de haber cumplido mi educación primaria en la Escuela N° 1 de Tocopilla y luego de haber rendido satisfactoriamente el exámen de admisión, en el mes de marzo de 1939, viajé a Copiapó, iba a ingresar a la Escuela de Minas, hoy Universidad de Atacama a seguir estudio en la especialidad de mecánica, era ésta la primera vez que salía de Tocopilla.
Recuerdo que en aquella época el viaje habia que hacerlo en tren, saliendo éste desde la estación de Tocopilla a María Elena y de ahí a Chacance para luego hacer transbordo y tomar el "Longino" que venía desde Iquique hacia el sur.
La despedida de los estudiantes era todo un acontecimiento, mezcla de alegría, pena y esperanza, alegria juvenil por la partida hacia otros horizontes, pena de los padres y familiares por el alejamiento de sus hijos, de esperanza por la búsqueda de un futuro para abrirse camino en la vida en el campo profesional, lo propio ocurría a quienes viajaban a la Escuela Normal de Copiapó.
¿Cuántos fuimos los que emprendimos la aventura llenos de ilusiones y esperanzas?... ¿Cuántos fueron los que lograron su propósito?... ¿Cuántos quedaron en el camino?... aún que ello no importa, lo que sí importa, es que hicimos el intento y que luego entregamos a nuestro pueblo el bajage de conocimientos adquiridos en aulas estudiantiles lejos fisicamente de nuestro terruño, pero con el corazón y pensamientos puestos día a día en nuestro añorado Tocopilla.
Los logros alcanzados en la enseñanza superior, debemos agradecercelos en gran medida a los maestros que en las escuelas primarias tocopillanas nos entregaron los conocimientos fundamentales para abrirnos un camino de superación que finalmente nos hicieran hombres útiles a la sociedad, unos en el terruño, otros en industrias o reparticiones en otras ciudades del país y más de algunos en el extranjero.
Cualquiera haya sido el rumbo que tomamos en nuestras vidas, hay una cosa cierta, somos hijos de Tocopilla y cada vez que retornamos a sus calles, nos viene a la memoria el recuerdo indeleble de nuestra escuela primaria y con ellos nos llega un profundo sentimiento de gratitud hacia quienes fueron nuestros guías en la niñez, nada es más justo y merecido que estas lineas sean dedicadas a los maestros que fueron los formadores de tantos ciudadanos de bien, a lo largo de sus vidas de educadores.
Pronto entraremos al tercer milenio y los maestros seguirán siendo los guías de las nuevas generaciones que enfrentarán un mundo más moderno, dinámico, exigente y competitivo pero menos solidario.
Gracias maestros por haber fundido en el crisol de la escuela primaria, a tantos hombres y mujeres que han entregado su aporte al desarrollo y progreso de la tierra que los vio nacer y que jamás han olvidado.
Tocopilla madre del viento. Bendito sean tus hijos.

jueves, 17 de agosto de 2006

Fue instalada la torre del reloj de Coya Sur.

El diario "La Prensa de Tocopilla" del dia viernes 30 de diciembre de 1983, nos presentaba esta asombrosa noticia en su página 6.
Tocopilla.- Expectación causó entre los tocopillanos la faena de ubicación del gigantesco reloj que está siendo instalado en calle Prat con Serrano y que corresponde al que por años perteneció a la oficina salitrera de Coya Sur, donado a la ciudad por la Sociedad Quimica y Minera de Chile (Soquimich).
El miércoles fueron instaladas las estructuras de la torre en su integridad, con altura que sobrepasa los 15 metros para lo cual fue necesario utilizar una poderosa grúa facilitada especialmente para cumplir con la operación. Como sus piezas son de madera, la faena debió realizarse tomando las precauciones de tal forma que no resultaran deterioradas.
Desde ya, pese a que aún le falta la instalación del reloj y pintarlo con los colores primitivos, la estructura se divisa en forma impresionante desde todos los ángulos.
En cuanto a la parte baja, sólo se observa por el momento la estructura que constituye la base, siendo esta de fierro. El espacio en total ocupa una superficie de unos 50 metros cuadrados, el que será convenientemente adornado y también protegido.
Comienza así a materializarse, en su etapa final, la instalación de esta pieza histórica que le ha sido entregada a su custodia a los tocopillanos, los cuales deberán sentirse orgullosos de contar con una reliquia tan preciada.
Conforme a los planes, es muy posible que la inauguración pueda llevarse a efecto en la primera quincena de febrero y quizás coincida con la celebración de los 60 años de "La Prensa de Tocopilla".

sábado, 12 de agosto de 2006

El aumento de vehículos motorizados obliga al municipio a dictar nuevas disposiciones sobre el tránsito público

Artículo originalmente publicado en la "Historia de Tocopilla" de Juan Collao Cerda, página 326, la fotografia fué sacada del libro de Giovanna Rossi titulado "Tocopilla, reseña histórica y Desarrollo urbano".
El 19 de Octubre de 1929, la Municipalidad procedió a dictar una nueva reglamentación de tránsito, acorde con las exigencias de la época, con el objeto de organizar en forma adecuada la circulación de automóviles y, en general, de toda clase de vehículos que iban paulatinamente aumentando en la ciudad.

El paradero de los autobuses, conocidos con el nombre de góndolas quedó ubicado en calle 21 de mayo, entre Cienfuegos y Rodríguez, de donde partían cada cinco minutos rumbo al sur, siguiendo por 21 de mayo hasta la calle San Martín, donde doblaban hacia Prat con el fin de toar el camino hacia la Villa Covadonga, pasando por las calles Riquelme, Latorre, Balmaceda y Juan Rafael Allende de la Colonia.

En Villa Covadonga el paradero de los microbuses estaba situado en un costado de la Pulpería de la Calle Exploration, de donde regresaban cada cinco minutos el puesto. En la Colonia llegaban hasta la calle Riquelme de donde pasaban a la calle Prat, subían por Sargento Aldea, doblaban hacia 21 de mayo para doblar nuevamente por San Martín hasta la calle Sucre. Al llegar a esta arteria los microbuses seguían rectamente hacia el norte hasta llegar a la calle Cienfuegos, de donde pasaban a 21 de mayo para llegar nuevamente al paradero.

Para el resto de los vehículos, se había dispuesto que el tránsito de norte a sur, sería exclusivamente por calle 21 de mayo desde O’Higgins hasta San Martín.

El tránsito de sur a norte, exclusivamente en la calle Sucre hasta la calle O’Higgins.

La subida de mar a cerro sería por la calle Sargento Aldea entre 21 de mayo y Sucre por San Martín, entre 21 de mayo y Prat.

En las otras calles de la ciudad se autorizaba transitar en distintas direcciones.

Los autobuses podían detenerse antes de cruzar las bocacalles, cuando hubieran pasajeros esperando la movilización, estando prohibido detenerse en cualquier otro punto de las calles, que no fueran los paraderos señalados.

El estacionamiento de los autos de arriendo estaba limitado al número de carros autorizados, en la siguiente forma:

Paradero de 21 de mayo, esquina Freire, lado mar, hasta 3 automóviles.

Paradero de Washington esquina 21 de mayo, lado norte, hasta 3 automóviles.

Paradero de Colón esquina 21 de mayo, lado norte, hasta 3 coches.

Paradero de Anibal Pinto esquina 21 de mayo, lado norte, 3 vehículos.

Paradero de Bolívar esquina 21 de mayo, lado norte, 3 automóviles.

Paradero de Baquedano esquina 21 de mayo, lado norte, 4 coches.

Paradero de 21 de mayo pasado Serrano, lado mar, 4 vehículos.

Paradero de Sucre esquina Anibal Pinto, lado poniente, 4 automóviles.

En los paraderos los vehículos debian quedar estacionados a ocho metros de distancia de la esquina.

Mientras que los estacionamientos más importantes eran del lado sur de 21 de mayo, por concentrar la mayoria de oficinas públicas y el comercio mayorista; los paraderos Washington y Freire cobraban animación nocturna por quedar próximos a los burdeles, casa de cena, restaurantes y piezas para alojados.

En cuanto al servicio de pasajeros a la pampa, los autos salían de las oficinas del diario “La Prensa”, a las 8 de la mañana y regresaban a las 4 de la tarde. El valor de los pasajes a María Elena era de $20.00 y a José Francisco Vergara $25.00. Ida y vuelta a “María” valía $30.00 y a Vergara $40.00.

En 1931 el recorrido se amplió a Pedro de Valdivia con un valor de $30.00 de ida y a $50.00 ida y vuelta.

Pesquera Guanaye, una nueva e importante industria local

Artículo publicado en un Fasciculo del 143° Aniversario de Tocopilla, que salia en el diario "La Tercera" titulado "De Latrille a Cantero 1843-1986" con fecha Domingo 28 de septiembre de 1986.
Un aporte más que positivo sino que fundamental para la economía local, lo constituye la instalación y puesta en marcha de la Pesquera Guanaye, que recientemente inició en forma oficial su actividad productiva de harina y aceite de pescado.
La Planta, ubicada en el sector de Caleta Vieja, al norte de la ciudad, fue concluida en su primera etapa y procesará 30 toneladas de pescado por hora, con una producción anual estimada en 31.000 toneladas de harina de pescado y 6.000 toneladas de aceite, todo lo cual generará divisas por US$ 11.000.000 anuales.

Cuenta con un personal, de mar y tierra, de 150 personas. Con una inversión de US$ 3.900.000, la construcción de la planta se realizó entre el 14 de noviembre de 1985 y el 20 de junio de 1986. En esa fecha, luego que Edelnor conectara la energia eléctrica, comenzó a operar y a producir. Las instalaciones ocupan una superficie de 50.000 m2, luego que hubo que remover 32.000 m3. de tierra y 12.000 m3 de rocas.

La planta, que dirige el administrador Juan Barrientos F., cuenta con modernas oficinas, servicios higiénicos, un casino y atractivas áreas verdes.

Pesquera Guanaye posee plantas reductoras en Arica, Iquique, Mejillones y Tocopilla. Y, al respecto, no es efectivo que la empresa se haya trasladado desde Antofagasta a Tocopilla. En el vecino puerto se mantiene una planta destinada a la producción de conservas para el consumo humano. Esta conservera produce mero congelado y mariscos destinados a mercados externos.

La instalación en este puerto se debió a que Tocopilla está en el centro de una amplia zona de pesca, lo que permite a la flota un considerable ahorro de combustible y una eficiencia de captura al disponer de cuatro puertos de descarga, cubriendo toda la zona norte.

Guanaye posee una flota de 29 barcos, pero de ellos sólo 3 están destinados a la planta de Tocopilla. Son pesqueros de alta mar “Marco 100″, cuenta, además, con 3 aviones Slander de prospección pesquera.

Se estudia la instalación de una segunda línea, lo que aumentaría a 90 toneladas/hora el proceso productivo. Además, existe un proyecto para contar con cuatro lineas de descarga, lo que cuadruplicaría la actual producción y cubriría hasta las más optimistas expectativas empresariales.

Cabe destacar, finalmente, que Guanaye cuenta con un centro de investigación y cultivo marino en Mejillones, que depende de la planta de Antofagasta.

En resumen, el aporte a la economía local que ha hecho Guanaye, se considera fundamental para ratificar el progreso y desarrollo de este puerto.

viernes, 11 de agosto de 2006

Industria pesquera en gran escala se proyecta instalar en Tocopilla

La firma Mateo Zlatar e hijo ha dado los primeros pasos para la instalación de una fábrica de harina de pescado con proyecciones futuras hasta llegar a la elaboración de conservas de los productos marinos. Asi lo decía "La Prensa de Tocopilla" en su edición del dia miercoles 20 de diciembre de 1961.
La firma pesquera Mateo Zlatar e hijo, proyecta instalar en nuestro puerto una industria de gran envergadura, para lo cual se ha elaborado un presupuesto por el orden de los 685 mil dólares, y en la cual, en principio se estima que podrán trabajar cien personas.

Primeramente la industria se dedicará a la producción de harina de pescado, pero está proyectada con miras hacia ampliaciones futuras hasta llegar a la producción de conservas de pescado.

Visita a Tocopilla

A fin de reconocer el terreno, ayer visitó Tocopilla el señor Mateo Zlatar, acompañado de su socio e hijo Hrvoj. También lo acompañaron los señores Luis Fredes, secretario del Departamento Antofagasta de la Corporación de Fomento de la producción y el señor Demetrio Tirado, técnico del mismo organismo.

Como primera medida visitaron al Gobernador del Departamento, señor Adolfo Márquez Palominos y conjuntamente con el director de obras de la Municipalidad, constructor civil Jorge González Hernández, recorrieron los terrenos del sector norte, encontrando ideal el lugar denominado “Caleta Vieja”.

Respecto a las instalaciones que hay en Caleta Vieja, consistentes en un balneario, los interesados entraron en conversaciones con el concesionario, llegándose en principio a un acuerdo para una futura transacción comercial, por lo cual se estima que no habrá impedimentos para que la industria sea instalada en ese sector.

El señor Mateo Zlatar nos dijo que para la cristalización del proyecto se cuenta con el apoyo del Vicepresidente Ejecutivo y del Gerente general de la CORFO, quienes demostraron interés por la iniciativa que significará una apreciable fuente de trabajo que entonará la economía local, ofreciendo el respaldo de la CORFO, para lo cual se dispone de los recursos económicos que sean necesarios.

Hizo presente el señor Zlatar que su industria no sería competidora de los pescadores profesionales de Tocopilla, ya que muy por el contrario ésta compraria el excedente de la producción diaria de los pescadores e incluso daría mayor actividad al frigorífico de la Empresa de comercio Agrícola.

Otros Aspectos

El señor Zlatar explicó que actualmente la industria de harina de pescado que poseen en Antofagasta con las instalaciones antiguas y de poca capacidad productiva se elabora como término medio un mil toneladas de harina al año.

Agregó que con las nuevas instalaciones fácilmente se alcanzaría a las 10 mil toneladas al año entre las dos fábricas y que se duplicaría la producción de conservas con un costo de 20 por ciento más bajo que el actual.

El señor Zlatar que toda su vida se ha dedicado a estas actividades, es hombre de gran experiencia en la materia y ha llegado a la conclusión de que el mejor puerto pesquero en Chile es Tocopilla.

Señala que nuestro puerto está en posición privilegiada para la instalación de industrias pesqueras, porque está entre dos lugares donde abundan las diversas especies, estas son Punta de lobo y Mejillones, de donde puede abastecerse durante todo el año, con una probabilidad 90 por ciento.

Otra ventaja que aprovecharian en sus instalaciones en este puerto, es la abundancia que hay en la zona de bonito Atún, Jurel, Cabaña, Sardinas, etc., lo que daría gran impulso a la fabricación de conservas.

Agradecimientos

El señor Zlatar y los funcionarios de la CORFO que le acompañaron en su visita a este puerto nos pidieron expresar sus agradecimientos por la acogida por demás favorable que le habian dispensado el Gobernador, señor Márquez, el Capitán de Puerto, señor José Gómez Martínez, y el Director de Obras Municipales, constructor civil Jorge González Hernández.

Regresan a Antofagasta

Cumplida la misión preliminar en Tocopilla, el señor Zlatar y sus acompañantes regresaron ayer en las primeras horas de la tarde a Antofagasta. Por su parte el señor Zlatar viajará en breve, nuevamente a Tocopilla, a fin de dar definitivo impulso al proyecto industrial.

Accidente de la Locomotora 604

Esta pequeña nota aparecía en la sección "Informaciones de Tocopilla" de la revista "Pampa" Número 16, del mes de julio de 1949.
La pericia y habilidad del obrero chileno quedaron de manifiesto una vez más en la Maestranza de Tocopilla. Foto N° 1. Estado en que quedó la locomotora N° 604, después del grave accidente ferroviario ocurrido en el ferrocarril de Tocopilla al Toco. Foto N° 2. Dos meses y 27 dias después de ocurrido el accidente, los obreros y mecánicos de la Maestranza de Tocopilla entregaron la locomotora N° 604, como nueva, pese a que en un principio se creyó tarea imposible de ejecutar.

martes, 8 de agosto de 2006

¿Son necesarios los semáforos o es una inversión que puede esperar?

Artículo que aparecía en la Contraportada del diario "La Prensa de Tocopilla" con fecha 12 de mayo del 2006, que creo estuvo de más, ya que las autoridades tocopillanas ni se inmutaron... Ciudadanía coincide que es un proyecto de suma urgencia. Puntos críticos están en las Avenidas "Arturo Prat", 18 de Septiembre y calle Baquedano de Tocopilla.
Desde hace algún tiempo el parque automotriz de Tocopilla ha ido en ascenso, lo cual puede pensarse como una señal de bienestar económico y modernidad. Sin embargo, ha traído asociado la congestión vehicular, principalmente donde se ubican las escuelas, que muchas veces se convierten en peligrosos puntos de atochamiento, donde los móviles de los apoderados y profesores, los taxicolectivos y los peatones coinciden en los horarios de ingreso y salida de los establecimientos.Por lo cual surgen dos interrogantes: ¿Es necesario un proyecto para la instalación de semáforos en la ciudad? O por tratarse de una comuna pequeña, ¿Es un gasto innecesario? Ese juicio se lo dejamos a las autoridades y por el momento quisimos tomar el pulso a las demandas de la ciudadanía y saber qué es lo que piensan sobre este tema.
Apoderada
Atelia Morales. madre de dos hijos, manifestó que es vital invertir en semáforos en Tocopilla, que deberían privilegiarse en el sector de las escuelas, porque "En las mañanas hay un tráfico tremendo y uno francamente anda con miedo", sentenció. Por su parte la jefa de la Unidad Técnica Pedagógica, UTP, de la Escuela "Carlos Condell", Norma Tejada, asume que la instalación de infraestructura vial es un tema de primera prioridad, argumentando "Como Prat es una avenida que une la carretera, pueden transitar buses, camiones con tolvas y acoplados, a toda hora del día y si no está el carabinero no respetan", relatando un episodio vivido hace algunas semanas cuando iban cruzando los niños de la jornada de la tarde y el camión no daba indicios de parar, por lo cual debió cruzarse y efectuar una denuncia ante la policía uniformada. "Si no ha habido ninguna desgracia es solamente porque Dios es grande", concluyó tajante esta docente.
Taxistas
Por su parte, los taxistas son otro sector que se adhiere a esta iniciativa, señalando "Yo como conductor creo que hace falta que se ordene el tránsito en la ciudad y para educar al peatón, que muchas veces llega y cruza, no a una distancia prudente para que uno pueda reaccionar" y luego añadió "Carabineros hace bien su tarea, pero no pueden estar en las esquinas todo el día", sentenció John Peralta, chofer de la locomoción colectiva.Una opinión similar entregó Ricardo Aracena, también conductor de la locomoción colectiva, quien aseveró "Son necesarios los semáforos, sobre todo en las escuelas. No sólo por la seguridad de los alumnos, sino para mejorar el tráfico vehicular", indicando como puntos de mayor conflicto la Avenida Prat frente a las Escuelas D-7 y el Colegio Sagrada Familia y el sector de la Avenida 18 de Septiembre, frente al Liceo B-2 y la calle Carrera donde se ubica el Establecimiento "Arturo Prat", concluyó.

viernes, 4 de agosto de 2006

8 Combates animarán la confrontación boxeril entre los clubes Green Cross y Unión Prat

Se efectuará esta noche en el Estadio O'higgins. Esta noticia salia en el diario "La Prensa de Tocopilla", edición del 10 de Marzo de 1962, cuando el Boxeo era una actividad habitual en Tocopilla.
El Estadio O'higgins será escenario esta noche, de la confrontación pugilistica entre el Green Cross de Antofagasta y Unión Prat de Tocopilla. El festival tendrá carácter de revancha, luego de haber medido fuerzas el 25 del mes pasado en el vecino puerto.
El programa consulta ocho combates; el preliminar estará a cargo de elementos novicios del club organizador. Además cuatro de las peleas intercity tendrán el carácter de revancha. Ellos son los combates que sostendrán, Arnoldo González y Juan Guerra; Hugo Soiza y Julio Guerra; Oscar Cerda y Hugo Figueroa; y Luis Castro y Enrique Reinoso. Los nombrados en primer término pertenecen al club visitante. Todas estas peleas prometen alcanzar interesantes ribetes, ya que se pudo apreciar en Antofagasta, la calidad y estilo de cada púgil.
El Programa
El festival se iniciará a las 9,30 p.m. y constará de ocho encuentros, de acuerdo al siguiente orden:
Mosca: Eduardo Castillo, vs. Carlos Tapia, ambos del Unión Prat, novicios.
Mosca: Arnoldo González (GG) vs. Juan Guerra (UP).
Gallo: Hugo Bascuñán (GG) vs. Juan Olivares.
Liviano: Mario Gomez (GG) vs. Alejandro Jiménez (UP).
Pluma: Hugo Soiza (GG) vs. Julio Guerra (UP).
Liviano: Hector Figueroa (GG) vs. Guillermo Cerezo (UP).
Pluma: Oscar Cerda (GG) vs. Hugo Figueroa (UP).
Medio mediano liviano: Luis Castro (GG) vs. Enrique Reinoso (UP).
Los dos últimos combates serán a cinco vueltas de dos minutos de pelea por uno de descanso.
Personal de Control
Para el control de los combates la Asociación designó el siguiente personal:
Arbitro General: Señor, Armando Baudoín R.; ayudante, señor Humberto Sepúlveda M,; cronometrador, señor Victor Alday; anunciador, señor, Andrés Castillo; inspector de ring, señor Alejandro Tapia; médicos, doctores, Roberto Hafon y Mateo Budinich; practicante, señor Eliseo Valdés.
Jurados, señores: Carlos Begliomini, José Martinetti, Francisco Campos, Juan Oportus, Arturo Sepúlveda, James Eldan, Dino Aste y Agustín Astete; árbitros, señores Armando Baudoín, Victorino Daza, Humberto Espinoza, Luis González, y Eduvino Guerrero.
Precios
Los precios fijados para este festival, serán los siguientes:
Ring-side, E° 1,30; platea, E° 1; galería adultos, E° 0,50; galería niños y socios, E° 0,20.

Pueblo fantasma: la encrucijada de Quillagua

Reportaje del programa Contacto, de Canal13 que era televisado en el año 2000, en donde se mostraba la realidad del Valle de Quillagua, la contaminación del Rio Loa por parte de Codelco y la lucha de sus dirigentes comunales como Porfirio Vega, recientemente fallecido, por sacar el pueblo adelante...
La señora Gladys es la encargada peinar, vestir y limpiar con crema a San Miguel Arcangel, que por el mil ochocientos, de manera misteriosa, vino a instalarse en este oasis del desierto para convertirse en el Patrono de Quillagua. En la devoción por su patrono reside la fuerza que le va quedando a este oasis de pasado glorioso, el cual se está secando.
La fiesta del patrono se celebra el 29 de septiembre y este año 2000 será crucial, ya que los quillaguinos que van quedando, van a rogar a su San Miguel, para que el oasis vuelva a florecer. Leer Más...

miércoles, 2 de agosto de 2006

Fué solicitado a la Municipalidad un plan para obras de pavimentación.

La Dirección General de Pavimentación presupuestó para el presente año E° 30.000 en beneficio de la comuna. Noticia del diario "La Prensa de Tocopilla" aparecida en primera plana, con fecha 9 de Marzo de 1962.
El Alcalde de la comuna, señor Julio Fernández Jiménez, recibió una comunicación del delegado provincial de Pavimentación Urbana, ingeniero Lamberto Paredes, en la cual le informa que la Dirección General del mismo servicio ha presupuestado para este año la suma de E° 30.000 para obras de pavimentación en la Comuna de Tocopilla.
El señor Paredes solicitó a la Municipalidad que confeccione un plan parcial para la ejecución de obras, según las necesidades de la comuna. Recomienda que el plan debe señalar los nombres de las calles que se desea pavimentar, el ancho y preferencias y refrentado por un acuerdo oficial de la corporación edilicia.
Proyecto del Plan
Se ha elaborado un proyecto del plan de obras, en el cual se indican las siguientes prioridades:
Avenida Diagonal, entre Rosario y Gómez Carreño, aceras costado sur y entre Tercera Sur y Orella, aceras costado norte; Matta, entre Cienfuegos y Freire, aceras costado poniente; Placilla Sur, entre Diagonal y Cuarta Poniente, aceras a ambos costados; Tercera Sur, entre Diagonal y Cuarta Poniente, aceras costado oriente, y entre Cuarta Poniente y Teniente Uribe, calzada y solera a ambos costados; Sexta Poniente, entre Teniente Uribe y Almirante Riveros, soleras; Almirante Riveros, entre sexta Poniente y Diagonal, soleras; Cuarta Poniente, entre la terminación de la calzada pavimentada y Orella, soleras, Orella, entre Cuarta Poniente y Diagonal, soleras; San Martín, entre 21 de mayo y Sucre; calzada Sargento Aldea, entre 21 de mayo y el cerro, soleras y aceras a ambos costados; 21 de mayo, entre San Martín y Anibal Pinto, costado poniente, aceras de baldosas con fajas de pastelones y tazas para árboles, y Sucre, entre Dolores y Teniente Uribe, calzada.

¿Fué un OVNI o no? (II)

Las dudas de las que hablábamos en el anterior "¿Fue un Ovni o no?" se materializan en este artículo publicado por el diario "La Prensa de Tocopilla": Ufólogo duda de veracidad de globos sondas. Jueves 19 de Abril de 2001.
El avistamiento del presunto globo sonda en el sector nororiente de Tocopilla, ha causado más de alguna duda en los centenares de pobladores que fueron testigos del hecho. Sus inquietudes tienen referencia con la estacionalidad que tenía el aparato en las alturas, que permaneció prácticamente estático por alrededor de dos horas, Leer Más...

martes, 1 de agosto de 2006

El Chupacabras en Tocopilla (IV)

Desde los comentarios del artículo "Arica y la noche oscura" del diario "El Morrocotudo" hemos sacado una narración de personas que vieron al Ente con membranas que subia por los roquerios de calle Colón en Tocopilla, tambien relatan lo que vivió un policia en Calama, cuando vieron a un extraño animal que parecía muy feroz, pero que era realmente muy mansito.
Tocopilla, 26 de abril del 2000. Tocopilla, ciudad costera ubicada a 159 kilómetros de Calama, vivió una noche de espanto, cuando habitantes ubicados en las partes altas, junto a los cerros, se percataron de la presencia de un "animal" de extrañas características. En un principio se creyó se trataba de una persona escalando el cerro, pero se descartó absolutamente después de observar... Leer Más...

El Chupacabras en Tocopilla (III)

Durante los años 2000 y 2001 el Chupacabras hizo de las suyas en la ciudad, como muestra el artículo del diario "La Prensa de Tocopilla" que siguió muy de cerca todo el fenómeno.
Seis familias tocopillanas ya no podrán saludar más a sus mascotas, pues en la desgraciada madrugada del lunes un trágico hecho truncó la vida de seis gatos, que murieron con unas extrañas marcas que coinciden con las dejadas por el... Leer Más...

sábado, 29 de julio de 2006

Extrañas Noticias de antaño... "Las Sombrillas"

Este curioso artículo aparecía en "La Prensa de Tocopilla", en una edición del año 1968. Estas sombrillas son las que todavia existen pero muy deterioradas por el paso de los años, a un costado de "La Hosteria".
Hace varios años la Municipalidad construyó sombrillas cerca de la playa, entre Caleta Boy y La Cabaña, con el fin de ofrecer comodidad a las numerosas personas que en la época de verano concurren a estos lugares, especialmente a aquellas que no tienen o no pueden llevar carpas. Pero se da el caso que en muchas oportunidades, ese preciso lugar es ocupado por personas que llegan en vehículos o bien por otras que instalan sus carpas bajo la sombra, con lo cual se priva de pasar un rato a cubierto de los rayos solares a personas que realmente lo necesitan. La foto captada ayer muestra una carpa bajo la sombrilla, lo que resulta anormal dadas las finalidades que se consideraron para su construcción.

viernes, 28 de julio de 2006

Tocopilla contará con pista de aterrizaje

¿Y... Las autoridades nunca se pusieron de acuerdo?, Según el diario "La Prensa de Tocopilla" con fecha 1 de Diciembre del 2003, en los próximos dias se estaría aprobando la autorización para una pista de aterrizaje en Punta Blanca... Para variar, esto tampoco se ha concretado.
En los próximos días tendría que estar aprobada la autorización para utilizar la pista de aterrizaje que se ubica en las cercanías de Punta Blanca, ello si Bienes Nacionales y la Dirección de Aeronáutica dan el visto bueno. Así lo informó Armando Gajardo, piloto tocopillano que realizó todas las gestiones administrativas para que esto fuese posible. Leer Más...

miércoles, 26 de julio de 2006

A 66 años del Aluvión...La leyenda del Roto la Mula.

Recordamos este inolvidable y trágico suceso ocurrido en Tocopilla el dia 26 de Julio de 1940, con esta narración extraida del libro "Tococuentos II" y escrita por Raúl Carvajal Egaña.
La leyenda del Roto la Mula.
Se llamaba Manuel Vergara Gaete, pero su nombre había quedado enterrado en un recodo del camino de la vida, donde siempre el tiempo se encarga de cubrirlo con la nebulosa del olvido.
Su recia y rechoncha figura -con suerte se empinaba por 1,64 mts- nos mostraba el retrato de un hombre forjado en la fragua candente del esfuerzo, que no solo esculpe el cuerpo, sino que también el alma de aquellos que están llamados a que su transitar por el mundo no termine al final del camino, sino que se prolongue en las memorias de las generaciones venideras.
Cuentan que en sus años mozos fue figura del equipo de box de la Armada, donde a fuerza de golpes sobre el cuadrilátero, se ganó el respeto de sus congéneres. Fué allí que adquirio también el sobrenombre de "El Roto", por sus raíces campesinas y, para diferenciarlo de los otros púgiles, cuya procedencia también era rural, le agregaron "que pega como una mula", por lo que quedó en los anales de la historia como "El Roto de la Mula".
En busca de nuevos derroteros, un dia cualquiera detuvo su caminar en un boyante puerto, donde veinte, treinta o más embarcaciones surtas en su bahía esperaban un turno para ser cargadas con salitre y emprender en viaje incierto, desplazandose en convoyes para protegerse del artero ataque de los submarinos alemanes pues en aquella época (1939-1945) Europa era el espejo de la estupidez del hombre, desangrándose en una guerra que pienso llegó a llevar a dios a arrepentirse de haber creado a la humanidad. El salitre aportaba vida a la tierra como abono y nutriente, pero como componente de la pólvora vomitaba muertes en los campos de batalla.
En Tocopilla el marino tambien encontraba compañía femenina, licor y música en los "Caguines del puerto", que eran el bálsamo que necesitaba el navegante al arribar a lugar seguro después de meses de navegación. Era época del oro blanco y Tocopilla una pequeña California, y por ese motivo llegaban forasteros día a día para trabajar, ya sea como lancheros, cargadores, estibadores u otros oficios inherentes a las faenas portuarias. Y en esas mismas condiciones arribó "El Roto de la Mula", en el mes de julio de 1940, precisamente el dia 14. Hacía tres dias que lloviznaba en forma intermitente sobre la zona, cuando a la medianoche del dia 25 comenzó a llover en forma torrencial. El agua se fue apozando tras los cerros, formando verdaderos diques, que parecían todos de lidia enfurecidos, que solo esperaban ser liberados para lanzarse con ira incontenible en estampida, bufando terror por sus narices y llevando la muerte en su loca y despiadada carrera por las quebradas aledañas, arrastrando tierra, piedras, quioscos y todo cuanto encontró a su paso.
Eran aproximadamente las 4 de la madrugada y el poblado de la Mina Despreciada sintió el embate de este apocalíptico aluvión. En su recorrido barrió con maquinarias, viviendas, enseres y lo más dramático, con vidas humanas. En la oscuridad de la noche el dios de la maldad pintó su obra maestra, siendo el dolor, el terror y la muerte, las musas de una inspiración diabólica que danzaban al compás de un frenético arpegio fúnebre. La madre naturaleza una vez más era cómplice de esta dantesca obra.
Aquella madrugada Tocopilla justificó plenamente la definición del vocablo indígena que le da el nombre de "Rincón del Diablo".
No se sabe qué lo llevó al lugar. No era un hombre curioso ni morboso, ni siquiera el típico "figurón" que aparece en estos casos para mostrarse y, en vez de ayudar, entorpece las labores de la gente que si lo quiere hacer con el solo fin de ser útil, o estar preparado para la tarea.
El lodazal se internaba en el mar, poniendo el color de las aguas de un café oscuro que iba desde la playa "El panteón" a "Caleta Vieja" por el norte. Al llegar vio gente que corría, lloraba y se lamentaba de rodillas mirando hacia los cielos, como pidiendole explicación al Dios de bondad en el que todos creemos. Al ver los cuerpos flotar entre féretros, maderos y un sinfín de objetos que habian sido arrastrados con el cementerio, llevándose a los "gentiles", sacándolos de la morada que sus deudos jamás pensaron que no sería la ultima para muchos de ellos, que siguieron su sueño eterno en el lecho del mar.
"El Roto de la Mula" quedó impávido como un autómata y con la vista fija en los cadáveres que, desnudos, flotaban sobre las olas como naves al garete. Empezó a despojarse de sus zapatos, luego de la ropa que le cubría el dorso y con decisión comenzó a introducirse en las frías aguas que en ese momento era un barrial turbio y arcilloso. "Capeó" el primer tumbo y siguió braceando acompasadamente pero con fuerza, se acercó a la primera víctima y al más cercano. Sintió un escalofrio al hacer contacto con el gélido cuerpo, lo asió por el cuello a la altura de la barbilla y empezó con mucha dificultad a nadar de vuelta hacia la playa, recorrido que se dificultaba con el torrente del mar. Al tocar fondo firme tomó el cuerpo entre sus brazos y lo depositó suavemente sobre la arena, donde se acercaron curiosos y gente que trataba de ayudar y reconocer la identidad del extinto. Alguien trató de decirle algo, pero fueron palabras que se llevó el viento, porque "El Roto" no hizo pausa y nuevamente se lanzó a las turbias aguas, repitiendo una y otra vez la misma acción, la cual era sacar el máximo de "finados" del mar, antes que lo venciera la fatiga.
Nadie sabe cuantas horas y minutos pasaron. Era como si el reloj del tiempo hubiera detenido su andar. Se le vio venir más lento que las veces anteriores y como un ceremonial preestablecido apareció con el último cadáver que flotaba en el sector, pero esta vez no lo dejó sobre la arena. Recorrió unos pasos más adentrándose en la playa y lo entregó a alguien que lo esperaba. Miró a esa persona a los ojos y, como pidiéndole perdón por lo que estaba haciendo, se lo entregó en sus brazos. ¡Era un niño! Exhausto, ya sin fuerzas, cayó de rodillas, tembloroso, con las manos crispadas por el frio externo, pero con una tranquilidad piadosa del que tiene la paz consigo después de tener la certeza de haber hecho lo correcto. Sintió el palmo de unas manos agradecidas sobre su espalda. Nadie pronunciaba palabra alguna. No habia para qué. Las palabras de admiración eran más elocuentes que mil frases. Le pasaron una raída frazada que lo cubrió parcialmente. Un vecino le ofreció una botella de vino. Ávidamente, "El Roto" la bebió casi hasta la mitad y la devolvió, giró sus pasos y lentamente se alejó hacia la ciudad hasta perderse al adentrarse en el caserío.
Un rayo de sol dibujó una sonrisa en el telón del horizonte, que luego se reflejó en los cerros aledaños, que también fueron mudos testigos de la hazaña de "El Roto de la Mula".
La historia la hacen los hombres que se encuentran en el lugar preciso y a la hora señalada en que ocurren los hechos, y que tienen la valentía y decisión para superar sus miedos y convertirse en héroes. Asi me lo contaron y asi lo cuento yo...